AMBIENTES DE APRENDIZAJE

Material elaborado por Sergio Peñafiel Jaime,

Taller de Desarrollo Personal y Profesional II, UV

En primer lugar, resulta evidente que toda asignatura debería permitir que el ciclo de aprendizaje se complete y que los alumnos con distintos estilos de aprendizaje tengan la misma oportunidad de aprender. Deberíamos evitar, por ejemplo, que un docente asimilador diseñe unidades apropiadas para sus alumnos asimiladores, pero difíciles y desmotivadoras para todos los alumnos que aprenden mejor de otra manera.

De hecho, toda escuela, programa y sesión de clases, suele tener una orientación definida con relación a las habilidades del aprendizaje. En consecuencia pueden distinguirse cuatro tipos de ambientes de aprendizaje:

a) Ambientes que enfatizan la experiencia concreta de hechos o sucesos. Los que se conocen como ambientes afectivos.

b) Ambientes que acentúan la conceptualización abstracta; llamados ambientes simbólicos.

c) Ambientes que atribuyen mayor importancia a la observación y la apreciación; llamados ambientes perceptivos.

d) Ambientes que propician el hacer cosas en situaciones reales y experimentar las consecuencias; llamados ambientes comportamentales.

Los Trabajos de Ronald Fry, indican que estos tipos de ambientes, pueden medirse observando las siguientes variables al nivel de curso:

a) Propósitos de las principales actividades

b) La fuente primaria de la observación

c) Como se usa la información

d) Las normas que regulan la conducta de los alumnos

e) La existencia o no de feedback y como éste se proporciona.

a) AMBIENTES AFECTIVOS DE APRENDIZAJE

En estos ambientes el alumno experiencia situaciones que luego son reflexionadas. Por lo general la información se genera en la misma actividad y a menudo surge de la comunicación de los sentimientos, valores y opiniones del alumno en una dinámica grupal o en el diálogo con el docente. Las actividades de docencia suelen acomodarse a las necesidades del alumno y la programación previa generalmente incluye los contenidos centrales pero deja amplio margen para ajustarse a la dinámica que se genere en la sesión. El docente a menudo pasa a ser un modelo y se relaciona personalmente en forma más horizontal que vertical.

La retroalimentación es dirigida a cada alumno de acuerdo a sus necesidades personales de desarrollo y no establece comparaciones entre alumnos. La retroalimentación puede ser proporcionada por el docente o por otros alumnos. Se acepta la discusión y la crítica sobre como se desarrolla el curso y por esta razón las sesiones combinan temas prescritos con temas emergentes.

Las investigaciones de Fry y Colab, indican que el ambiente afectivo es más apropiado para los alumnos cuya habilidad más desarrollada es la del aprender de la experiencia concreta (divergentes y acomodadores). Desafortunadamente, sin embargo, este ambiente no favorece el aprendizaje de los estudiantes que aprenden más de la conceptualización abstracta (asimiladores y convergentes).

b) AMBIENTE PERCEPTIVO DE APRENDIZAJE

En este ambiente el objetivo principal es entender la materia; que los alumnos identifiquen relaciones entre conceptos, definan problemas a investigar; sean capaces de reunir información relevante y conduzcan investigaciones. A los alumnos se les pide que vean tópicos o fenómenos desde distintos puntos de vista (su experiencia, opiniones de expertos, literatura), y de distintas maneras (escuchar, observar, escribir, discutir, participar, pensar, etc.). En las actividades el énfasis se pone en como se resuelve el problema o hace la tarea, es decir, se enfatiza más el proceso que la solución. El desempeño de los alumnos no se mide por criterios rígidos sino que se les pide a los alumnos que definan por sí mismos sus criterios de éxito. Las diferencias individuales son usadas para enriquecer la comprensión y se alienta a los alumnos para que exploren otras ideas, opiniones, y reacciones; para que desarrollen su propia perspectiva. Durante este proceso el docente sirve de espejo o facilitador: contesta preguntas con preguntas en una actitud no evaluativa y relaciona lo que allí está ocurriendo con otros hechos de la actividad profesional. El docente crea un sistema de recompensas que enfatiza la indagación y la búsqueda, y no tanto en responder lo que se ha leído. En las sesiones suele destinarse parte del tiempo a examinar los pasos, sucesos y decisiones anteriores para orientar el trabajo futuro.

El ambiente perceptivo, facilita el aprendizaje de los alumnos que descansan más en su observación reflexiva (Divergentes y Asimiladores), pero inhibe el aprendizaje de los estudiantes cuya fortaleza descansa en la experimentación activa (Acomodadores y Convergentes)

c) AMBIENTE SIMBOLICO DEL APRENDIZAJE

En este ambiente el alumno procura resolver problemas que tienen una sola respuesta o una mejor solución. La fuente de información y el tópico o problema tratado son abstractos: no se dan en el presente sino que se informa sobre ello por medio de textos de lectura, datos numéricos, dibujos, fotos, etc. Existen reglas que especifican como los alumnos deben procesar la información, por ejemplo, símbolos, tecnología computacional, lenguaje técnico, teoremas, modelos, protocolos, etc. A menudo se exige que los alumnos memoricen estas reglas, conceptos y relaciones.

El docente es considerado como el representante del saber sobre la materia, que juzga y evalúa lo que hacen sus alumnos, interpreta la información que no puede procesarse con las reglas y procedimientos enseñados y vigila que se mantengan metodologías y el rigor científico del campo de estudio. El docente también define el tiempo de la sesión y cada actividad, define que tareas se hacen. El docente asegura que se cumpla las secuencia de hechos para que los alumnos participen del ejercicio analítico necesario para lograr la solución sin que los alumnos tengan que preocuparse de definir las metas ni de administrar como usan el tiempo.

El éxito se mide por el logro de la mejor solución, la opinión de los expertos, o algún criterio definido por el docente y aceptado en el campo de la profesión. Las decisiones relativas al flujo y a la naturaleza de las actividades del curso son tomadas por el profesor cuando planifica cada sesión.

El ambiente simbólico, es particularmente adecuado para los estudiantes con un fuerte desarrollo de la conceptualización abstracta (Asimiladores y Convergentes), pero es un ambiente que inhibe el aprendizaje de los alumnos cuya fortaleza reside en la experiencia concreta (Acomodadores y Divergentes).

d) AMBIENTE COMPORTAMENTAL DE APRENDIZAJE

En este ambiente se enfatiza la activa aplicación de conocimientos y destrezas a la solución de problemas prácticos. No necesariamente hay una respuesta óptima o una solución ideal para el problema, pero se supone que existe algo que los alumnos pueden relacionar con, valorar, o simplemente sentir la satisfacción intrínseca de haber resuelto el problema. Por lo general se trata de problemas de la vida real, casos o simulaciones, que los alumnos podrían enfrentar como profesionales. Al enfrentar los problemas lo importante es asumir la tarea y complementarla. Puede que existan límites de tiempo o períodos en que se comprueban los avances para lo que se requiere informes, pero en la mayor parte de las sesiones son los propios alumnos los que administran su tiempo. Cada alumno, debe preocuparse de los efectos que su comportamiento tendrá en la tarea total.

De la misma manera, el alumno sabe que su próxima actividad está relacionada con lo que realiza actualmente. De allí que el alumno siempre debe tomar decisiones y escoger opciones sobre que hacer después y como hacerlo. El docente está disponible como un asesor o consultor, pero sobre la base de que los propios alumnos soliciten asesoría o ayuda. El éxito se mide en función de la tarea: cuan bien funcionó, cuan factible es, cuan aceptable para el cliente, cuan eficiente reducción de costos, cuan consistente con los valores, etc.

El ambiente comportamental es el más apropiado para los alumnos con una fuerte orientación a la experimentación activa (Convergentes y Acomodadores), pero inhibe el aprendizaje de los estudiantes con una clara orientación a la observación reflexiva (Divergentes y Asimiladores).

LA OPCION POR EL AMBIENTE DE APRENDIZAJE

Es importante recordar que tanto los alumnos, como los docentes que se encuentran en un curso, tienen un estilo de aprendizaje que han desarrollado previamente. Además el estilo de aprendizaje de cada persona tiende a influir en las ideas que esa persona tiene sobre como aprende la gente, de manera que los docentes suelen diseñar sesiones que reflejan su propio estilo y que no necesariamente coinciden con el ambiente más propicio para sus alumnos. Por esta misma razón, las personas tienden a rechazar las metodologías de enseñanza que son contrarias a su propio estilo y en consecuencia, suele ocurrir que muchos estudiantes reclamen contra cursos que se diseñan para expandir sus intereses.

Estos problemas pueden administrarse mejor cuando docentes y alumnos expresan abiertamente sus teorías o creencias sobre como aprende mejor la gente. Con esta actividad los estudiantes pueden informarse sobre los objetivos del curso y el docente puede identificar la variedad de estilos de aprendizaje de sus alumnos, lo que le permitirá ajustar su manera de enseñar.

Otra conclusión que surge de las investigaciones sobre ambientes de aprendizaje, es la necesidad de individualizar la enseñanza. Los métodos tradicionales de docencia son demasiado homogéneos y suelen favorecer a un sólo estilo de aprendizaje, perjudicando a los estudiantes que preferirían aprender de otra manera. En consecuencia, nuestros alumnos aprenderían mucho más si logramos diseñar ambientes que se ajustan a los estilos de aprendizaje de los estudiantes, y si los programas respetan el ritmo personal de aprendizaje. Un camino para individualizar la enseñanza es modificar el rol del docente: pasar del rol de proveedor de información a ser un facilitador del proceso de aprendizaje.

Finalmente, es importante recordar que las organizaciones necesitan profesionales con cada uno de los estilos de aprendizaje discutidos, y tal vez lo más importante, las organizaciones se benefician más con la mezcla de estilos. La condición óptima es aquella en que las fortalezas de cada estilo permite compensar sus respectivas debilidades y ello sólo se obtiene cuando los profesionales aprenden a trabajar en grupo. Sería apropiado, entonces, que ayudemos a que nuestros estudiantes aprendan a trabajar en grupos.